Artículos

Chávez o Capriles y el futuro
(Prensa y Expresión) Para el ganador las cosas no serán fáciles. Inflación, desempleo y una mono economía petrolera son problemas mayores. Inseguridad, asistencialismo y corrupción son cuestiones endémicas. Por Ricardo Trotti
(Prensa y Expresión) El futuro es incierto para Venezuela. Todos parecen creer que no habrá fraude en las elecciones presidenciales, aunque es fácil demostrar que Hugo Chávez ya viene haciendo fraude desde hace meses con una campaña electoral sostenida con recursos del propio Estado y con el apoyo de una maquinaria mediática y de propaganda oficial con centenares de periódicos, radios, televisoras y páginas de internet que el Presidente fue tejiendo a los largo de esta década.
Chávez tiene la ventaja de utilizar todas las artimañas del poder para poder llevarse la Presidencia, en un sistema de eterna relección que no tiene par en los sistemas políticos de América Latina, por lo que podrá eternizarse hasta el 2019 sin problemas y pensar incluso en el después. Si Chávez gana nada cambiará, todo seguirá igual tanto en forma interna como en el exterior donde lidera al grupo de naciones del ALBA.
Si Chávez pierde el mayor reto será para Henrique Capriles. Nadie quisiera estar en sus pantalones para tener que lidiar con una transición hasta enero de 2013, mientras que en diciembre habrá otra elección a la que la oposición posiblemente llegue todavía unida, pero de ahí en más todo es incertidumbre. El reto mayor para Capriles será cómo gobernar un país con una mayoría chavista en la asamblea y cómo resolver el problema de que todos los entes estatales, desde los más oficiales a los más autárquicos, hace rato que dejaron de ser entidades y poderes independientes.
Para el ganador las cosas no serán fáciles. Inflación, desempleo y una mono economía petrolera son problemas mayores. Inseguridad, asistencialismo y corrupción son cuestiones endémicas.
A pocos días de las elecciones nada parece indicar que están definidas. Las encuestas no son confiables porque todos sospechan que responden a intereses de las agencias y empresas según el espectro de la polarización en que se encuentran. Mientras tanto nada se sabe de los futuros posibles vicepresidentes y tampoco cuán agresivo o no sigue siendo el cáncer que padece Chávez.
Ningún resultado se puede aventurar. Habrá que esperar hasta los resultados definitivos.
Ricardo TrottiConsejero ConsultivoDirector ejecutivo de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), con sede en Miami, donde trabaja desde 1993 habiéndose desempeñado como director del Instituto de Prensa y de Libertad de Prensa. Es periodista de origen argentino, nacionalizado estadounidense, especialista en libertad de prensa y ética periodística. Fue asistente del director de El Nuevo Herald, Miami y jefe de Redacción de El Liberal en Santiago del Estero, Argentina; fue redactor y fotógrafo en publicaciones de Washington y columnista sindicado sobre libertades de prensa y expresión en numerosos medios de América Latina y EE.UU. Es autor de varios libros y recibió premios nacionales e internacionales por su labor profesional. Fue fellow en Harvard University del Centro Weatherhead sobre Asuntos Internacionales en 2013-2014. Dicta conferencias y seminarios sobre ética periodística y libertad de prensa, temas que refleja en su actividad como artista plástico.
(Prensa y Expresión) El futuro es incierto para Venezuela. Todos parecen creer que no habrá fraude en las elecciones presidenciales, aunque es fácil demostrar que Hugo Chávez ya viene haciendo fraude desde hace meses con una campaña electoral sostenida con recursos del propio Estado y con el apoyo de una maquinaria mediática y de propaganda oficial con centenares de periódicos, radios, televisoras y páginas de internet que el Presidente fue tejiendo a los largo de esta década.
Chávez tiene la ventaja de utilizar todas las artimañas del poder para poder llevarse la Presidencia, en un sistema de eterna relección que no tiene par en los sistemas políticos de América Latina, por lo que podrá eternizarse hasta el 2019 sin problemas y pensar incluso en el después. Si Chávez gana nada cambiará, todo seguirá igual tanto en forma interna como en el exterior donde lidera al grupo de naciones del ALBA.
Si Chávez pierde el mayor reto será para Henrique Capriles. Nadie quisiera estar en sus pantalones para tener que lidiar con una transición hasta enero de 2013, mientras que en diciembre habrá otra elección a la que la oposición posiblemente llegue todavía unida, pero de ahí en más todo es incertidumbre. El reto mayor para Capriles será cómo gobernar un país con una mayoría chavista en la asamblea y cómo resolver el problema de que todos los entes estatales, desde los más oficiales a los más autárquicos, hace rato que dejaron de ser entidades y poderes independientes.
Para el ganador las cosas no serán fáciles. Inflación, desempleo y una mono economía petrolera son problemas mayores. Inseguridad, asistencialismo y corrupción son cuestiones endémicas.
A pocos días de las elecciones nada parece indicar que están definidas. Las encuestas no son confiables porque todos sospechan que responden a intereses de las agencias y empresas según el espectro de la polarización en que se encuentran. Mientras tanto nada se sabe de los futuros posibles vicepresidentes y tampoco cuán agresivo o no sigue siendo el cáncer que padece Chávez.
Ningún resultado se puede aventurar. Habrá que esperar hasta los resultados definitivos.
