Artículos
Monitoreo de la gobernabilidad democrática
El espejo regional de los argentinos
Tanto la mayoría de los legisladores como los ciudadanos argentinos consultados muestran sus preferencias por los gobiernos democráticos de la región que adoptan políticas económicas pro mercado, lo cual estaría contradiciendo la tesis de que tanto el kirchnerismo como sus “alternativas opositoras”, son el fruto de la cultura política estatista que predomina entre los argentinos.Por Gabriel C. Salvia
Los gobiernos que garantizan la convivencia democrática, favorecen al crecimiento económico y gradualmente generan inclusión social, parecerían ser los preferidos por los políticos y la ciudadanía argentina, aunque a simple vista se perciba todo lo contrario.
Por ejemplo, en la encuesta “Barómetro Legislativo: Agenda Económica e Institucional 2010-2011” realizada por CADAL a 45 legisladores nacionales integrantes de comisiones vinculadas a temas económicos se incluyó la siguiente pregunta: ¿Cuál es su país de referencia en América Latina, es decir, aquél cuyo desempeño político, económico e institucional Ud. querría que fuese imitado por la Argentina? Nada menos que 83,7% de quienes respondieron la encuesta tomaron a Brasil como el primer país de referencia, 72,1% lo hizo con Chile y 65,1% con Uruguay. En cuanto a la admiración por los países conocidos como del bloque bolivariano del ALBA, las referencias fueron mínimas: Bolivia recibió 2 referencias, una sola Venezuela y ninguna Ecuador, mientras que Cuba únicamente recogió una adhesión. Por su parte, tres legisladores del total (7%) marcaron su respuesta con la opción “ninguno”.
De esta manera, pudiendo indicar no más de cuatro opciones, el grueso de los diputados y senadores consultados indicó invariablemente que la Argentina tiene en tres de sus países limítrofes sus referentes principales, con prescindencia de la corriente de pensamiento que inspira a sus actuales líderes. Justamente, en la última década los tres estados han cambiado el gobierno de un signo político hacia otro y los parámetros centrales de cada uno de ellos en materia económica e institucional casi no variaron.
La misma pregunta fue encargada por CADAL a Carlos Fara y Asociados, mediante un estudio de opinión pública en Capital Federal y los partidos del Gran Buenos Aires, llevado a cabo entre los días 21 y 24 de Mayo de 2011. Sobre 442 casos, en un relevamiento domiciliario en GBA y telefónico en Capital Federal a ciudadanos argentinos mayores de 18 años en condiciones de votar, respetando cuotas por sexo y edad, el 38% respondió Brasil, el 19% Uruguay, otro 19% Venezuela y el 16% Chile.
Es decir, tanto la mayoría de los legisladores como los ciudadanos consultados muestran sus preferencias por los gobiernos democráticos de la región que adoptan políticas económicas pro mercado, lo cual estaría contradiciendo la tesis de que tanto el kirchnerismo como sus “alternativas opositoras”, son el fruto de la cultura política estatista que predomina entre los argentinos.
Y aunque a diferencia de los legisladores, un número mayor de ciudadanos encuestados hayan elegido a Venezuela como país de referencia, de todas maneras los gobiernos moderados del vecindario reúnen las mayores preferencias. En ambos casos, para reafirmar esta esperanzadora comparación regional, las mismas coinciden con el buen desempeño que tienen los tres países de referencia en el ranking que elabora CADAL “Democracia, Mercado y Transparencia”.
En efecto, sobre un total de 169 países Chile se ubicó en la edición 2010 en el puesto número 16, Uruguay en el 22 y Brasil en el 57, de este ranking que de manera muy simple brinda la posibilidad de agrupar el grado de respeto a las libertades civiles, políticas, económicas y los niveles de transparencia, ayudando a comprender muy fácilmente por qué en algunos países se goza de una mayor calidad de vida que en otros y también permite a cada uno desde su lugar ver las fortalezas y debilidades de su propio país.
Argentina se ubicó en el puesto 73, justo en la mitad de tabla en América Latina, superando a todos los países del bloque chavista: Bolivia 93, Ecuador 100, Nicaragua 109, Venezuela 148 y la Cuba del “patriota latinoamericano” en el 161. Así, la Argentina mantiene una suerte de “tercera posición”, que claramente no la encamina al desarrollo y tampoco la hunde más en el subdesarrollo.
En definitiva, ante un año de elecciones presidenciales en la Argentina y sin debates e ideas claras por parte de los candidatos, una pregunta cuya respuesta ayudaría a clarificar el “modelo” de país de cada uno de los postulantes es precisamente las experiencias comparadas que toman como referencia en América del Sur. Y si evaden esta respuesta aludiendo a un modelo propio, estará claro que habrá más de lo mismo, con los resultados conocidos y con las inversiones yendo a los países vecinos que adoptaron la economía social de mercado como política de estado.
Gabriel C. Salvia es Director General del Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL).
Gabriel C. SalviaDirector GeneralActivista de derechos humanos enfocado en la solidaridad democrática internacional. En 2024 recibió el Premio Gratias Agit del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Checa. Es autor de los libros "Memoria, derechos humanos y solidaridad democrática internacional" (2024) y "Bailando por un espejismo: apuntes sobre política, economía y diplomacia en los gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner" (2017). Además, compiló varios libros, entre ellos "75 años de la Declaración Universal de Derechos Humanos: Miradas desde Cuba" (2023), "Los derechos humanos en las relaciones internacionales y la política exterior" (2021), "Desafíos para el fortalecimiento democrático en la Argentina" (2015), "Un balance político a 30 años del retorno a la democracia en Argentina" (2013) y "Diplomacia y Derechos Humanos en Cuba" (2011), Sus columnas de opinión han sido publicadas en varios medios en español. Actualmente publica en Clarín, Perfil, Infobae y La Nación, de Argentina. Ha participado en eventos internacionales en América Latina, África, Asia, Europa, los Balcanes y en Estados Unidos. Desde 1992 se desempeña como director en Organizaciones de la Sociedad Civil y es miembro fundador de CADAL. Como periodista, trabajó entre 1992 y 1997 en gráfica, radio y TV especializado en temas parlamentarios, políticos y económicos, y posteriormente contribuyó con entrevistas en La Nación y Perfil.
Los gobiernos que garantizan la convivencia democrática, favorecen al crecimiento económico y gradualmente generan inclusión social, parecerían ser los preferidos por los políticos y la ciudadanía argentina, aunque a simple vista se perciba todo lo contrario.
Por ejemplo, en la encuesta “Barómetro Legislativo: Agenda Económica e Institucional 2010-2011” realizada por CADAL a 45 legisladores nacionales integrantes de comisiones vinculadas a temas económicos se incluyó la siguiente pregunta: ¿Cuál es su país de referencia en América Latina, es decir, aquél cuyo desempeño político, económico e institucional Ud. querría que fuese imitado por la Argentina? Nada menos que 83,7% de quienes respondieron la encuesta tomaron a Brasil como el primer país de referencia, 72,1% lo hizo con Chile y 65,1% con Uruguay. En cuanto a la admiración por los países conocidos como del bloque bolivariano del ALBA, las referencias fueron mínimas: Bolivia recibió 2 referencias, una sola Venezuela y ninguna Ecuador, mientras que Cuba únicamente recogió una adhesión. Por su parte, tres legisladores del total (7%) marcaron su respuesta con la opción “ninguno”.
De esta manera, pudiendo indicar no más de cuatro opciones, el grueso de los diputados y senadores consultados indicó invariablemente que la Argentina tiene en tres de sus países limítrofes sus referentes principales, con prescindencia de la corriente de pensamiento que inspira a sus actuales líderes. Justamente, en la última década los tres estados han cambiado el gobierno de un signo político hacia otro y los parámetros centrales de cada uno de ellos en materia económica e institucional casi no variaron.
La misma pregunta fue encargada por CADAL a Carlos Fara y Asociados, mediante un estudio de opinión pública en Capital Federal y los partidos del Gran Buenos Aires, llevado a cabo entre los días 21 y 24 de Mayo de 2011. Sobre 442 casos, en un relevamiento domiciliario en GBA y telefónico en Capital Federal a ciudadanos argentinos mayores de 18 años en condiciones de votar, respetando cuotas por sexo y edad, el 38% respondió Brasil, el 19% Uruguay, otro 19% Venezuela y el 16% Chile.
Es decir, tanto la mayoría de los legisladores como los ciudadanos consultados muestran sus preferencias por los gobiernos democráticos de la región que adoptan políticas económicas pro mercado, lo cual estaría contradiciendo la tesis de que tanto el kirchnerismo como sus “alternativas opositoras”, son el fruto de la cultura política estatista que predomina entre los argentinos.
Y aunque a diferencia de los legisladores, un número mayor de ciudadanos encuestados hayan elegido a Venezuela como país de referencia, de todas maneras los gobiernos moderados del vecindario reúnen las mayores preferencias. En ambos casos, para reafirmar esta esperanzadora comparación regional, las mismas coinciden con el buen desempeño que tienen los tres países de referencia en el ranking que elabora CADAL “Democracia, Mercado y Transparencia”.
En efecto, sobre un total de 169 países Chile se ubicó en la edición 2010 en el puesto número 16, Uruguay en el 22 y Brasil en el 57, de este ranking que de manera muy simple brinda la posibilidad de agrupar el grado de respeto a las libertades civiles, políticas, económicas y los niveles de transparencia, ayudando a comprender muy fácilmente por qué en algunos países se goza de una mayor calidad de vida que en otros y también permite a cada uno desde su lugar ver las fortalezas y debilidades de su propio país.
Argentina se ubicó en el puesto 73, justo en la mitad de tabla en América Latina, superando a todos los países del bloque chavista: Bolivia 93, Ecuador 100, Nicaragua 109, Venezuela 148 y la Cuba del “patriota latinoamericano” en el 161. Así, la Argentina mantiene una suerte de “tercera posición”, que claramente no la encamina al desarrollo y tampoco la hunde más en el subdesarrollo.
En definitiva, ante un año de elecciones presidenciales en la Argentina y sin debates e ideas claras por parte de los candidatos, una pregunta cuya respuesta ayudaría a clarificar el “modelo” de país de cada uno de los postulantes es precisamente las experiencias comparadas que toman como referencia en América del Sur. Y si evaden esta respuesta aludiendo a un modelo propio, estará claro que habrá más de lo mismo, con los resultados conocidos y con las inversiones yendo a los países vecinos que adoptaron la economía social de mercado como política de estado.
Gabriel C. Salvia es Director General del Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL).