Cuando este tipo de eventos se producen es muy importante que la música se involucre y pueda dar su opinión, sin que sean reprimidos o silenciados por las autoridades. Es importante que puedan ser la voz de aquellos que nadie escucha.

Por Dolores Barón

En las últimas semanas Chile estuvo viviendo momentos intensos, con muchas manifestaciones y roces con el gobierno. Desafortunadamente, esto generó muchos heridos y muertos. El movimiento artístico estuvo involucrado y se ocupó de dar su postura y acompañar la movilización.

Uno de los hechos que más visibilizó a nivel global la participación activa de músicos chilenos con la causa de las protestas fue la presentación de la reconocida cantante Mon Laferte, en los premios Grammy Latino. En la alfombra roja, se descubrió el pecho y tenía escrito “En Chile torturan, violan y matan”. Además, ganó un premio por su último álbum y recitó un poema de La Chinganera: “Chile me dueles por dentro. Me sangras por cada vena. Me pesa cada cadena. Que te aprisiona hasta el centro. Chile afuera, Chile adentro. Chile al son de la injusticia. La bota de la milicia. La bala del que no escucha. No detendrá nuestra lucha. Hasta que se haga justicia”. Por esto y seguir haciendo declaraciones en entrevistas apoyando las protestas y en contra de la represión policial, esta última la está denunciando.

Además, la cantante lanzó una canción hace poco llamada “Pla ta tá”, en la que habla de todos estos episodios que sucedieron en la calle y fueron en contra del gobierno. También Ana Tijoux, rapera chilena, sacó una canción llamada “#Cacerolazo” en donde apunta explícitamente contra Piñeira y su gobierno. Por otro lado, varios músicos chilenos, entre ellos la ya mencionada Mon Laferte, Roberto Márquez, Gepe, Francisca Valenzuela, Augusto Schuster, Camila Gallardo y Princesa Alba, hicieron una reversión de uno de los temas más conocidos de la música chilena: El derecho de vivir en paz de Victor Jara. Fue una iniciativa plenamente de los músicos y el productor Christopher Manhey, apoyados por la viuda de Jara, Joan Turner, y la fundación del mismo.

Asimismo, más de veinte músicos chilenos organizaron el Festival Todas las Voces en pos de colaborar con alimentos, ropas y demás. El Festival se dio el 31 de octubre en el Teatro Caupolicán. El evento incluyó artistas como Moral Distraída, Denise Rosenthal, Sol y Lluvia, entre otros.

Cuando este tipo de eventos se producen es muy importante que la música se involucre y pueda dar su opinión, sin que sean reprimidos o silenciados por las autoridades. Es importante que puedan ser la voz de aquellos que nadie escucha. Por eso es importante la libertad de expresión artística, porque al arte no se le puede callar y de lo contrario pierde todo su sentido como arte.

Dolores Barón

Ex-Pasante de CADAL y estudiante de periodismo en la Universidad Del Salvador (USAL)